Arropado por las cumbres que culminan las sierras de Ronda, Grazalema y Las Nieves, el Valle del Genal supone uno de los parajes más bellos y poco conocidos de la provincia de Málaga. Este rincón perteneciente a la comarca de la Serranía de Ronda alberga un gran número de atractivos situados a pocos kilómetros de la popular Costa del Sol, convirtiéndola en una región rica en patrimonio natural, tradiciones y gastronomía. Este recóndito valle debe su nombre al río Genal, un torrente de aguas transparentes que nace en Igualeja y desemboca en el río Guadiaro dando vida a los 15 municipios que lo integran y donde, a diferencia de las bulliciosas urbes, el tiempo se detiene y la vida sigue un ritmo lento y pausado.
Si te interesa visitar este pintoresco paraje, a continuación te presentamos los recursos más destacados y las actividades más habituales que podrás practicar en este bello rincón malacitano:
1. Montes cobrizos y castañas.
En primer lugar y sin duda alguna, si hay algo que caracteriza al Valle Genal son los kilómetros de bosques de castaños (unas 4000 hectáreas) que resguardan sus montes y que con la llegada del otoño recubren sus laderas con tonos cobrizos y anaranjados, configurando así un paisaje otoñal de singular belleza y que es posible visitar a través de diversas rutas que parten de los municipios de Pujerra, Igualeja Júzcar, Faraján o Alpandeire (este último lugar de nacimiento del reconocido Fray Leopoldo de Alpandeire).
Y es que en esta zona la castaña es el producto estrella y alrededor de ella gira una profesión ancestral que se ha convertido en seña de identidad de los habitantes de los pueblos que conforman este valle. De hecho, la recolección de este codiciado fruto, que tiene lugar entre los meses de octubre y noviembre, es motivo de celebración en muchos de estos pueblos y va acompañada de fiestas patronales que festejan tanto el inicio como el final de la recolecta.
Sin embargo, aunque sea una tradición que se extiende por toda la región, Pujerra es el municipio de las castañas por excelencia, pues es aquí donde se encuentra la Cooperativa Castañas Valle Del Genal S.C.A, a través de la cual se comercializa la mayor parte de las castañas del valle y que cuenta con unas instalaciones de las más avanzadas de Europa en lo que a tecnología se refiere. Su producción, que ronda los 50.000 kg al día, se exporta a países europeos como Italia o Francia, siendo muy popular el comercio de la codiciada Marrón Glacé, unas castañas glaseadas que se han extendido por las más prestigiosas confiterías como una extraordinaria delicatesen.
2. Pitufos y micología.
Cerca de las localidades de Pujerra e Igualeja, encontramos un paraje nada común, un municipio de color azul que resalta entre las verdes colinas del Valle del Genal. Un pueblo de origen árabe catalogado como el Primer Pueblo Pitufo del Mundo y que se ha convertido en un verdadero parque temático que gira en torno a esta serie animada desde que en 2011 la compañía Sony lo eligiera para promocionar el estreno de la película: Los Pitufos 3D.
Desde entonces, casas y edificios se visten de un tono azul claro para recibir a los turistas que llegan cada fin de semana a visitar las pinturas y edificios relacionados con estos entrañables personajes, así como el mercapitufo, un mercado artesanal de temática pitufa que sirve para promocionar y comercializar los productos locales de la zona.
Júzcar, que así se llama realmente este llamativo pueblo, es un lugar ideal para las escapadas en familia y en especial para el disfrute de los más pequeños que podrán fantasear y divertirse en este peculiar entorno de película que actualmente recibe más de 50.000 visitantes anuales.
Y no es para menos, pues además del singular color que recubre sus fachadas, este municipio se encuentra bajo unas condiciones ecológicas que lo hacen idóneo para la producción de setas silvestres en la temporada de otoño. Actualmente el Ayuntamiento de Júzcar, además de otras actividades relacionadas con estos hongos, ha puesto en marcha un proyecto denominado Investigación y Difusión de la Micología en el Bosque Mediterráneo: laboratorio experimental de Júzcar, la cual pretende potenciar el sector micológico a nivel general y el cultivo de la onerosa trufa en particular, un manjar considerado como uno de los más caros del mundo.
Por último, también es posible visitar la primera Fabrica Real de Hojalata de España, construida en 1725 y que a día de hoy ha sido ha sido rescatada, restaurada y reconvertida en una Bodega Artesana y Ecológica. Esta finca que alberga 15.000 viñas de diferentes tipos, ofrece al visitante la posibilidad de catar sus propias elaboraciones, cenar y alojarse en sus instalaciones.
3. Arte moderno y tradición.
En el corazón de este valle se encuentra la localidad de Genalguacil, un municipio que desde 1994 celebra cada dos años los Encuentros de Arte, un evento internacional y único en el mundo donde artistas de diversos lugares llegan para plasmar sus obras en las propias calles del pueblo.
Las esculturas y pinturas se entremezclan con la arquitectura popular, convirtiendo este pintoresco pueblo en un museo al aire libre, donde el visitante puede pasear por sus calles y contemplar obras de arte moderno que se fusionan con un paisaje rural y tradicional, donde el olor a chimenea sigue inundando el ambiente como hace siglos.
4. Costumbres y comidas ancestrales.
Por último lugar, no podemos olvidar el municipio de Benalauria con su Museo Etnográfico, un antiguo molino del siglo XVIII destinado a la extracción de aceite mediante el prensado de la aceituna y el cual conserva intactas su maquinaria y herramientas hoy día. Se trata de un edificio de gran valor etnológico donde el turista tiene la posibilidad de visitarlo y disfrutar de una proyección audiovisual que le hará comprender el funcionamiento de la viga monumental de castaño que se usaba para la actividad de prensado.
Además de este museo, Benalauria es un pueblo coqueto y pintoresco que ofrece una rica gastronomía donde posible degustar los mejores productos de la comarca: carnes, setas y castañas, siendo el plato estrella el solomillo relleno de setas de temporada y cebolla confitada acompañado de una crema de castañas al brandy.
Por último, cabe mencionar que la mejor fecha para visitar el Valle del Genal es otoño, pues el clima que acompaña al visitante es fresco y no demasiado caluroso ni demasiado frío. Además, el paisaje otoñal de esta zona hace que las colinas se tiñan de un manto cobrizo, un regalo a los ojos del visitante que puede presenciar la recolecta de la castaña, visitar el primer pueblo pitufo del mundo, contemplar obras de arte moderno en un entorno rural y degustar verdaderas delicias en un área de pocos kilómetros cuadrados, rodeado de montañas y colinas, y refrescado por las aguas del río Genal el cual da nombre a este bello paraje que supone un tributo para los cinco sentidos.
Si estás interesado en visitar este bello rincón malacitano enclavado en plena Andalucía, no dudes en ponerte en contacto con nuestros profesionales, los cuales diseñaran tu experiencia a medida.
Por: IRENE NAVARRO FRANCO
Los castaños están amarillos, ardieron con el incendio.
Ruta otoñal por los pueblos de la Sierra de ronda, en coche y senderos dificultad baja. Gracias